Ruta Gaudí - El legado de un arquitecto visionario
Rutas 06/03/2024
Barcelona posee una singular esencia y eso es gracias al Modernismo y a su máximo exponente, un gran icono de este movimiento, el arquitecto Antoni Gaudí, que impregnó la ciudad de su magia y creatividad diseñando algunos de los edificios más emblemáticos.
Hemos preparado una ruta para ayudarte a descubrir la Barcelona del maestro del modernismo catalán. Es complicado recorrer toda la colección de obras de Gaudí en un mismo día, por eso, hemos dividido la ruta en dos partes, una con los edificios principales y otra con algunas de las creaciones menos conocidas.
Si tu idea es visitar los lugares, uno a uno, de forma detallada, te recomendamos que hagas la ruta en 2 días. Si, por el contrario, piensas hacer una ruta “rápida” sin visitar el interior de los edificios, es posible que puedas completarla entera en un mismo día. Eso sí, empieza temprano y con un buen desayuno porque será un día bien completo.
Park Güell (Carrer d’Olot)
Empezaremos la ruta por el Park Güell, un parque con más de 100 años de historia declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1984. Eusebi Güell hizo el encargo a Gaudí del proyecto de una urbanización privada para familias acomodadas, pero la idea no funcionó y este espacio se acabó convirtiendo en el parque público más bonito de la ciudad. A la entrada del parque por la Calle Olot encontraréis la Casa del Guarda y en el interior del parque, está también la actual Casa Museo Gaudí, que en su momento fue la casa de la familia Güell.
Para visitar el interior del parque es necesario comprar una entrada, además, recomendamos comprarla de forma anticipada por la web para evitar las colas y asegurar la disponibilidad a la hora deseada.
Casa Vicens (Carrer de les Carolines, 20-26)
Muy cerca del Park Güell, a 1.5km, encontramos la Casa Vicens, la primera casa modernista diseñada por Gaudí, la que marcó su debut en Barcelona. Se construyó entre 1883 y 1885 como residencia de verano para la familia Vicens. Se puede visitar desde hace relativamente poco, ya que tras una restauración de tres años, en noviembre de 2017 abrió sus puertas al público.
Sagrada Familia (Carrer de la Marina, 253)
La siguiente parada es la gran obra maestra del arquitecto, la Sagrada Familia. Puedes llegar desde la Casa Vicens con el metro en apenas 15 minutos. Esta será, probablemente, la visita más larga de toda la ruta, vale la pena entretenerse un rato y fijarse en cada rincón de sus diferentes fachadas y, sobre todo, disfrutar del increíble interior. Si quieres descubrir todas las curiosidades sobre la Sagrada Familia para saber exactamente dónde mirar, échale un vistazo a este artículo de nuestro blog.
Para visitar el interior de la Basílica es necesario comprar la entrada de forma anticipada reservando día y hora.
Después de una pausa para comer, la ruta sigue hacia la Manzana de la Discordia, donde encontramos dos grandes edificios de Gaudí: la Pedrera y la Casa Batlló.
La Pedrera o Casa Milà (Passeig de Gràcia, 92)
Es el edificio civil más emblemático del famoso arquitecto, se considera una verdadera obra de arte por sus innovaciones constructivas y por la ornamentación y decoración. Fue un encargo de la familia Milà en 1906. Una vez construido, en 1912, la familia ocupó el piso principal y el resto de viviendas las alquiló.
Es posible visitar el interior y la terraza superior con las famosas chimeneas. Es recomendable comprar la entrada de forma anticipada para evitar las colas.
Casa Batlló (Passeig de Gràcia, 43)
Está considerada una de las obras más originales de Gaudí, el encargo de 1904 consistió en el proyecto de reforma de la vivienda del empresario textil Josep Batlló. Esta obra pertenece a su época más naturalista y se dice que en la fachada del edificio el artista representó la famosa leyenda de Sant Jordi. Puedes ver en la propia página web oficial, cada uno de los detalles que reflejan la leyenda. Y también puede comprar las entradas online si quieres visitar su interior sin hacer cola.
Casa Calvet (Carrer de Casp, 48)
La siguiente parada de la ruta queda a unos 950m de la Casa Batlló, se trata de la Casa Calvet, una de las primeras obras de Gaudí. Data de 1899 y en ella se puede apreciar el estilo todavía conservador del artista, aunque ya se marcaban ciertos elementos de carácter modernista en su fachada. Esta casa se construyó en homenaje al barroco catalán utilizando piedra de Montjuïc. Actualmente, la planta baja es un restaurante y desde su interior se puede apreciar el interiorismo modernista.
Después de descubrir una de las primeras creaciones de Gaudí, la siguiente parada ya sería la última. Si vas con tiempo suficiente, te recomendamos que cojas algo de merienda por el camino para recargar un poco las pilas antes de la última visita gaudiniana del día.
Palau Güell (Carrer Nou de la Rambla, 3-5)
Si todavía tienes fuerzas, puedes llegar caminando, hay cerca de 2km de distancia, pero es un paseo agradable ya que cruzas la Plaça Catalunya y bajas por la emblemática Rambla. Si lo prefieres, también puedes llegar en metro con la L4, son 15 minutos.
El Palau Güell fue construido entre 1886-1890, por encargo del mecenas de Gaudí, Eusebi Güell, como residencia familiar. Actualmente, es posible visitar el Palacio y, realmente, vale la pena entrar para terminar la primera parte de la ruta descubriendo sus interiores y la famosa linterna de la planta noble, que recuerda una cúpula estrellada.
Entre los barrios más exclusivos de la ciudad, Sarrià y Pedralbes, se encuentran otras tres piezas del arquitecto. Si optas por la ruta rápida, es posible que te de tiempo de pasar a ver estos tres lugares también en el mismo día, pero si prefieres hacer una ruta más tranquila que te permita descubrir todos los detalles de Gaudí, necesitarás un día más para acercarte a estas zonas, ya que quedan algo más apartadas del centro de la ciudad.
Torre Bellesguard (Carrer de Bellesguard, 20)
La Torre Bellesguard es una de las obras más desconocidas del artista, de hecho, todavía se trabaja en la investigación de su origen y esclarecimiento de su historia. Lo único que se sabe es que se construyó entre 1900 y 1909 como finca de verano para la viuda Figueres en homenaje a la Catalunya Medieval con una libre interpretación del gótico civil.
Col·legi de les Teresianes (Carrer de Ganduxer, 85-105)
De la Torre Bellesguard se puede bajar caminando hasta el Col·legi de les Teresianas, un proyecto encargado en 1889 a Gaudí directamente por la congregación de las Teresianas para construir un colegio internado femenino. Una de sus piezas más austeras debido al escaso presupuesto de la congregación, pero que se compensan con detalles de lo más destacados.
Pabellones de la Finca Güell (Avinguda de Pedralbes, 7)
En la Finca Güell se encontraba a finales del s. XIX la finca de veraneo de la familia Güell, en el proyecto de reforma que se realizó entre 1884 y 1887, Gaudí se encargó de proyectar el jardín y los pabellones que son ahora visitables.
El recinto permanecerá cerrado a partir del 1 de marzo de 2024 por actuaciones de mejora.
Colonia Güell (Santa Coloma de Cervelló)
Si después de la intensa ruta, todavía tienes ganas de seguir descubriendo más obras de Gaudí, a unos 20km de Barcelona, en Santa Coloma de Cervelló, se puede visitar la Colonia Güell, un conjunto de edificaciones que componían una colonia industrial donde la fábrica textil ocupaba la mayor parte del tiempo de las personas que vivían en ella.
Es un lugar realmente bonito, especialmente la zona de la Cripta, si tienes tiempo para poder escaparte a hacerle una visita, realmente vale mucho la pena.
"El arquitecto del futuro se basará en la imitación de la naturaleza, porque es la forma más racional, duradera y económica de todos los métodos." - Antoni Gaudí
