Origen e historia del vermut en Catalunya
Gastronomía 11/09/2024
El vermú, vermut o vermouth (del alemán "Wermut", que significa ajenjo o artemisa) es una bebida alcohólica categorizada, compuesta de una base de vino fortificado con un destilado y una mezcla de hierbas, entre ellas, el mencionado ajenjo, flores, raíces, pieles de cítricos, especias y caramelo, variando estos ingredientes en función del tipo de vermut.
El primer registro de un antecedente similar nos lleva a Hipócrates, célebre médico y filósofo de la antigua Grecia, quien puso a macerar en vino, flores de ajenjo y hojas de díctamo y obtuvo lo que en la Edad media fue llamado "vino hipocrático" o, sencillamente "vino de hierbas".
Es en la ciudad de Turín donde a principios del siglo XIX se lo empezó a conocer como un producto regional, de la mano de Antonio Benedetto Carpano, quien comenzó a comercializar su preparación de vino con un aproximado de 30 botánicos. Más tarde se extendió a Francia, España, Estados Unidos y Argentina, al atraer un gran número de inmigrantes italianos a finales del siglo XIX y durante todo el siglo XX.
(Imagen cortesía de CARPANO)
La llegada del vermouth a España se produce a finales del siglo XIX por influencia de distintos empresarios y productores italianos, que se asentaron especialmente en las regiones vitivinícolas de Cataluña (sobre todo Barcelona y Reus).
El sector del vermut en Catalunya ya suma alrededor de cincuenta elaboradores aunque, hoy en día casi todas las regiones españolas producen multitud de vermut con excelentes calidades y distintas peculiaridades.
¿Cuál es el origen de la hora del vermut en Barcelona?
El Bar Torino fue un establecimiento hostelero (en su día, fue considerado el bar más lujoso de la ciudad) situado en el paseo de Gracia, 18 de Barcelona, creado en 1902 y desaparecido en 1911. El bar fue fundado por el italiano Flaminio Mezzalama, natural de Turín (en italiano: Torino), de ahí el nombre del establecimiento. Su intención era la de introducir en Barcelona el vermut Martini & Rossi.
El origen de las frases "tomar el vermut", "hacer el vermut" o "la hora del vermut", hace referencia a un acto social, surgido durante los años del franquismo cuando las familias de clase media y los amigos comenzaron a reunirse en los bares los domingos después de la misa de las doce. En los años cincuenta del siglo XX, se convirtió en un hábito que reflejó la identidad de una ciudad que acababa de salir de la posguerra.
¿Cuáles son los tipos de vermut más habituales? Existen varios tipos de vermut en el mercado. La diferencia entre ellos es el tratamiento que se hace a las uvas en el proceso de elaboración.
Vermut Rojo
Es el más convencional, teniendo un perfil más dulce, herbal (destacando el ajenjo) y levemente especiado. De todos los tipos de vermut es el que más se consume en nuestro país. Es una bebida ideal para el aperitivo.
Vermut Blanco
Es más dulce que el rojo, porque se utilizan menos ingredientes amargos a la hora de prepararlo. En su elaboración se suele usar una combinación de flores (saúco y manzanilla en la mayoría de los casos), raíces (por ejemplo genciana y regaliz) y resinas (como el enebro).
Vermut Rosado
Es el que menos se consume de todos, aunque se está empezando a poner de moda. En su elaboración se mezclan vinos tintos con blancos consiguiendo ese tono rosa.
Vermut Seco
El vermut seco es el más amargo de los tres y se suele consumir en coctelerías. El protagonismo en este caso lo tienen los aromas frutales. Sus notas se relacionan con raíces, cortezas y un sutil perfil de especias.
Reus acoge la primera gran exposición de artículos relacionados con el vermut del mundo, una colección que se encuentra en el edificio del MUSEU DEL VERMUT, en el centro de la ciudad. Un edificio modernista completamente reformado y que conserva la fachada original de 1918.
Se trata de una colección única y abierta al público, que recoge más de 6000 artículos, más de 1800 botellas, 400 carteles, 3000 etiquetas y centenares de objetos de publicidad relacionada con el vermut, como ceniceros, vasos, chapas, documentos, cartas, postales, bandejas, etc. El Museu del Vermut de Reus también acoge una elegante vermutería y un moderno restaurante de cocina mediterránea, donde poder disfrutar de un buen aperitivo y de una buena experiencia gastronómica.
Por último, algunos consejos para degustar un vermut en condiciones:
- Evitar tomar el vermut en vaso de tubo, la mejor opción es un vaso con la boca ancha para añadir un par de cubitos.
- Como parte de la esencia de los vermuts son los cítricos, es recomendable añadir a los vermuts blancos una rodaja de limón y a los negros una cáscara de naranja para darle un toque extra de amargura e intensidad.
- Al ser una bebida que tiene entre 15° y 20° de alcohol, mejora con la frescura y es más refrescante con unos cubitos de hielo, que harán su textura más suave y fluída.
- No es un producto que mejore con los años. Lo mejor es consumirlo cuando está en el mercado. Una vez abierto, aguanta bien unos meses en la nevera.
- El vermut merece un respeto en tanto y cuanto elaborarlo, es un oficio que necesita conocimientos de enología, botánica y espirituosos.
Y, que no falte un buen brindis: "Estiro el brazo, doblo el codo y me lo tomo todo."
Es en la ciudad de Turín donde a principios del siglo XIX se lo empezó a conocer como un producto regional, de la mano de Antonio Benedetto Carpano, quien comenzó a comercializar su preparación de vino con un aproximado de 30 botánicos. Más tarde se extendió a Francia, España, Estados Unidos y Argentina, al atraer un gran número de inmigrantes italianos a finales del siglo XIX y durante todo el siglo XX.
(Imagen cortesía de CARPANO)
La llegada del vermouth a España se produce a finales del siglo XIX por influencia de distintos empresarios y productores italianos, que se asentaron especialmente en las regiones vitivinícolas de Cataluña (sobre todo Barcelona y Reus).
El sector del vermut en Catalunya ya suma alrededor de cincuenta elaboradores aunque, hoy en día casi todas las regiones españolas producen multitud de vermut con excelentes calidades y distintas peculiaridades.
¿Cuál es el origen de la hora del vermut en Barcelona?
El Bar Torino fue un establecimiento hostelero (en su día, fue considerado el bar más lujoso de la ciudad) situado en el paseo de Gracia, 18 de Barcelona, creado en 1902 y desaparecido en 1911. El bar fue fundado por el italiano Flaminio Mezzalama, natural de Turín (en italiano: Torino), de ahí el nombre del establecimiento. Su intención era la de introducir en Barcelona el vermut Martini & Rossi.
El origen de las frases "tomar el vermut", "hacer el vermut" o "la hora del vermut", hace referencia a un acto social, surgido durante los años del franquismo cuando las familias de clase media y los amigos comenzaron a reunirse en los bares los domingos después de la misa de las doce. En los años cincuenta del siglo XX, se convirtió en un hábito que reflejó la identidad de una ciudad que acababa de salir de la posguerra.
¿Cuáles son los tipos de vermut más habituales? Existen varios tipos de vermut en el mercado. La diferencia entre ellos es el tratamiento que se hace a las uvas en el proceso de elaboración.
Vermut Rojo
Es el más convencional, teniendo un perfil más dulce, herbal (destacando el ajenjo) y levemente especiado. De todos los tipos de vermut es el que más se consume en nuestro país. Es una bebida ideal para el aperitivo.
Vermut Blanco
Es más dulce que el rojo, porque se utilizan menos ingredientes amargos a la hora de prepararlo. En su elaboración se suele usar una combinación de flores (saúco y manzanilla en la mayoría de los casos), raíces (por ejemplo genciana y regaliz) y resinas (como el enebro).
Vermut Rosado
Es el que menos se consume de todos, aunque se está empezando a poner de moda. En su elaboración se mezclan vinos tintos con blancos consiguiendo ese tono rosa.
Vermut Seco
El vermut seco es el más amargo de los tres y se suele consumir en coctelerías. El protagonismo en este caso lo tienen los aromas frutales. Sus notas se relacionan con raíces, cortezas y un sutil perfil de especias.
Reus acoge la primera gran exposición de artículos relacionados con el vermut del mundo, una colección que se encuentra en el edificio del MUSEU DEL VERMUT, en el centro de la ciudad. Un edificio modernista completamente reformado y que conserva la fachada original de 1918.
Se trata de una colección única y abierta al público, que recoge más de 6000 artículos, más de 1800 botellas, 400 carteles, 3000 etiquetas y centenares de objetos de publicidad relacionada con el vermut, como ceniceros, vasos, chapas, documentos, cartas, postales, bandejas, etc. El Museu del Vermut de Reus también acoge una elegante vermutería y un moderno restaurante de cocina mediterránea, donde poder disfrutar de un buen aperitivo y de una buena experiencia gastronómica.
Por último, algunos consejos para degustar un vermut en condiciones:
- Evitar tomar el vermut en vaso de tubo, la mejor opción es un vaso con la boca ancha para añadir un par de cubitos.
- Como parte de la esencia de los vermuts son los cítricos, es recomendable añadir a los vermuts blancos una rodaja de limón y a los negros una cáscara de naranja para darle un toque extra de amargura e intensidad.
- Al ser una bebida que tiene entre 15° y 20° de alcohol, mejora con la frescura y es más refrescante con unos cubitos de hielo, que harán su textura más suave y fluída.
- No es un producto que mejore con los años. Lo mejor es consumirlo cuando está en el mercado. Una vez abierto, aguanta bien unos meses en la nevera.
- El vermut merece un respeto en tanto y cuanto elaborarlo, es un oficio que necesita conocimientos de enología, botánica y espirituosos.
Y, que no falte un buen brindis: "Estiro el brazo, doblo el codo y me lo tomo todo."